Habia una vez, en una pequeña ciudad del departamento del Quindio, una hormiguita llamada Marina,como era la hormiga reina de la colonia, tenìa muchos hijos y era la que màs trabajaba en su colonia. Corrìa todo el dìa a despachar para el trabajo a su zàngano marido y a sus 300 hijos para la escuela, cuidaba de sus larvas y en el transcurso del dìa organizaba su colonia.
Su hijo mayor y mas querido viajò al amazonas y se enontrò con una anaconda que lo secuestro, ella como madre dedicada fue a rescatarlo. Saco todo lo necesario para el viaje y sin pensarlocorrìo al amazonas, en el camino encontro muchos animales los cuales le ayudaron a buscarlo. Pasaban minutos, horas, dìas, semanas y nada que hallaba pista alguna de la anaconda y mucho menos de su hijo, la hormiga ya estaba desesperada y no sabia que hacer. Entonces, un buho que conocia muy bien el lugar le aviso del lugar donde se encontraba su hijo, la acompañò pero aparecieron de repente seis micos ladrones que sabian kung fu, y desplumaron al ave, dejando a la hormiga indefensa, en esos momentos llego el elefante que custodiaba toda la selva junto a su manada y llego a apropiarse èl del caso de la hormiga desaparecida, desde que se enterò del caso puso a toda su manada a buscar a la hormiga.
La madre por su desespero empezò a practicar yoga y se tranquilizaba, poco tiempo despues, en otro lugar muy cercano se encontraron en una cantina a unas gatas alegres las cuales le dieron una pista de donde vivia la anacanda.
Marina corrio a avisarle al elefante de la pista que tenia sobre su hijo, pero el solo le dijo que ya se estaba haciendo la busqueda y que tratara de calmarse porque en realidad su hijo podia esetar en cualquier parte y que la pista podia ser falsa, Marina muy enojada salio de la estaciòn y buscó ayuda de su prima la cual la apoyó para que no se rindiera en la búsqueda de su pequeño hijo.
De repente el pinguino sacerdote quien usando su filosofia logro calmar a Marina, pero Marina al ver la negligencia del elefante policía siguio insistiendole y él no le hacía caso.
Pasaron dos dias y Marina decidio ir a buscar a su hijo en compañía de su prima, el rey de las ardillas y muchos animales más y después de una intensa búsqueda, por fin lo encontraron, estaba dopado y en mal estado de salud, todos los animales que andaban en su búsqueda aprearon a la anacanda y la llevaro a la estación de policía.
El hijode Marina aprendío que no se puede confiar en todo el mundo y que sobrevivir lejos de la colonia es muy dificil. El hijo de Marina regresó a casa con ella a trabajar como ya estaba aconstumbrado y Marina siguió gobernando su colonia como siempre y fue una hormiga feliz y realizada por siempre.
¡FIN!
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